miércoles, 3 de marzo de 2010

Las Chocotoñis

El otro día estuvieron en la ETSII los vampiros. No, no Bracula, estuvo la Cruz Roja para que la gente de por allí donara sangre. Como suele pasar, a la enfermera le costó encontrarme la vena en el brazo. ¡Ya le diré yo la próxima vez donde tiene que pinchar! (Sí, soy ingeniero, pensador y humorista, un parto aprovechado).

Vosotros diréis "¡Que gran persona es Tobas, que dona sangre y todo!". Nah, yo veo a un tío en la calle desangrándose y le doy un trapo para que limpie la sangre. Vaya guarro, que vaya a morirse a su casa como todo el mundo. No, lo que a mi me interesa es merendar gratis. Allí suelen llevar unas cajicas de dulces, refrescos y "pulevas". Y dado que mi sangre vale más que la de naide, yo suelo arrasar con los bollos.

El producto estrella es, sin duda, la chocotoñi. Viene a ser un Maritoñi, pero de chocolate (de ahí lo de choco). Es lo que más. Hay quien, incluso, apina que tienen gusto a vino, aunque ese es un debate demasiado complejo para realizarlo aquí. No hay suficientes gigas en blogger para poder escribir todo lo que hay que decir sobre el presunto sabor a vino de las chocotoñis.

No parecía, cuando empecé a escribir este texto, que tuviera ningún objetivo, ni que hubiera algún desenlace. Pero si que lo hay. Cuando acabé de donar 7 u 8 litros de sangre, además de 3 riñones, me di cuenta de que no había chocotoñis. Me tuve que conformar con un par de repulsivas choco-cañas. Moraleja: antes de donar, mirad a ver que dulces hay, no vaya a ser que desperdiciéis vuestra sangre en salvarle la vida a algún desgraciado a cambio de nada.

Bueno, se acabó esta preciosa historia, que ha tenido de todo: princesas (las enfermeras, que más bien parecen infantas), dragones (yo, después de comerme dos chococañas, una maritoñi y un puñado de batidos) y, sobre todo, mucha sangre. En el próximo programa os hablaremos de las palmeras. ¿Realidad? ¿Leyenda Urbana? ¿Alucinación colectiva? ¿Palmeras? Lo sabremos la próxima semana, a la misma hora y en este mismo canal.

Photobucket

8 comentarios:

Ramsdell dijo...

Mi buen amigo y mortadelo Tobas, en este post te has salido,para mi es una de las mas celebres historias que podías contar. Solo te ha faltado añadir que tu sangre no coagula cuando el enfermero (con cara de enfermera) te pincha y coloca una gota de tu valiosa sangre un liquido (debe ser el gintonic de los vampiros).

Tobas dijo...

Si, mi sangre es deliciosa. Un día me pegué un bocao en el brazo y me quedé manco de lo buena que estaba.

Ramsdell dijo...

¿Pero que estaba bueno: la sangre o el brazo?

Tobas dijo...

La sangre. El brazo estaba correoso

Ramsdell dijo...

¿sabia a correa?

Tobas dijo...

No, a correo electronico

Ramsdell dijo...

de yahoo, de hotmail, de gmail??

Tobas dijo...

de terra, coño


Todos los derechos reservados.
Página Principal: Tobas
Mail de contacto: tobasj@gmail.com