El mes pasado, se estreno el Capítulo VII de la saga Star Wars, la primera película desde que Disney compró a Lucas y su imperio. Si George le sacó rendimiento al producto, con dos trilogías, juguetes, todo tipo de merchandising, comics, videojuegos, libros, series de animación y todo tipo de especiales y spin-off, la mercadotecnia de Disney, el grupo de comunicación más poderoso del mundo, le está sacando partido a lo que han comprado de otro millón de maneras. De hecho, ya sabemos que, aparte de la nueva trilogía, se van a lanzar algunos spin-offs nuevos, esta vez en forma de largometrajes. El primero, para finales de 2016.
¿Qué tal El Despertar de la Fuerza? Bueno, antes de hablar de eso, repasemos lo que teníamos antes, centrándonos en las dos trilogías de largometrajes.
Primero teníamos la segunda trilogía, aquella antigua, con una peli muy entretenida, el episodio 4, llamado en España "La Guerra de las Galaxias", que resultó una revolución para el cine de ciencia ficción y aventuras.
En segundo lugar, cuando George Lucas se dió cuenta de que la cosa podía tirar para delante, convirtió esto en saga, con una secuela muy superior, El Imperio Contraataca, en la que, realmente, se incidía en el transfondo filosófico y religioso de la obra, se profundizaba más en los personajes, y sobre todo en Darth Vader, que dejaba de ser un secundario que, incluso, recibía órdenes de otros, para ser ahora el centro de la producción. Y es que, aquí, Lucas pudo contar con un director de cine de verdad, como lo es Irvin Kershner.
Y la tercera parte de la trilogía era El Retorno del Jedi, que tenía algunas cositas buenas, pero el conjunto en general no era gran cosa. En cualquier caso, toda la trilogía estaba genialmente ambientada por la música de John Williams.
Esta trilogía de películas marcó un antes y un después en la historia del cine, y también marcó a una generación. Yo no había nacido, y viendo las películas con una distancia temporal importante, no puedo proclamarme un fan de las producciones como obra audiovisual. Me parece genial la idea, y el transfondo filosófico, el proceso iniciático del héroe, la tentación del lado oscuro, la lucha interna, pero no soy un gran fan, como digo, de la puesta en escena de la trilogía en general, salvo en el caso de El Imperio Contraataca, que creo que congrega todo lo bueno de la saga.
Después de muchos años de juegos, cómics, series y libros que agrandaban el tamaño del universo Star Wars sin límites, Lucas decidió crear otra trilogía, en este caso, precuela de la anterior. Pero resulto un chasco bastante importante para todo fan, una obra muy centrada en los efectos visuales y la acción, con personajes muy poco profundos (los protagonistas eran jedis, muy sosos), con momentos muy aburridos, historias sin sentido, y ni el más mínimo significado. Quizás todo lo bueno, la bajada a los infiernos de Anakin Skywalker hasta convertirse en Darth Vader, se guardó para el Episodio III, La Venganza de los Siths. Si bien Lucas quería mostrar como un corazón bueno puede sucumbir al lado oscuro por el miedo de perder a aquellos a los que procesa amor, y también por ego, la producción del filme tan solo nos mostraba a un niñato enfadado con su maestro porque se creía el más fuerte. La película, aún con todo el transfondo que debía contener, se centra mucho en peleas, y matanzas de Jedi, que a mi me divirtieron mucho, pero no significan nada.
Este pequeño resumen nos pone en antecedentes sobre qué esperar con el lanzamiento del capítulo 7, estrenado a finales de 2015. Lucas ya no es el que manda, Disney ha puesto al mando a JJ Abrams, creador de Perdidos, que casualmente también se encarga de las nuevas películas de Star Trek, dirigiendo así las dos grandes sagas de ciencia ficción del cine mundial.
Vimos a Abrams en Super 8, recreando de forma deliverada el espíritu de los Goonies, y parece que en el episodio 7 ha hecho algo parecido con respecto a la saga original, Quizás demasiado, hay quien ha llegado a denominar a esta película como un remake. Y es que, es genial que tengamos de nuevo ese espíritu de aventuras, que la película sea, esquemáticamente, igual que Una Nueva Esperanza (el episodio 4), pero, ¿Quizás no hubiera sido mejor contar algo nuevo? Además, hay que tener en cuenta que Star Wars esna obra una obra que nace de la cabeza de George Lucas, así que toda la filosofia, la moral, la ética, todo lo que subyace en la obra, nace en la mente de Lucas. ¿Qué puede subyacer ahora en una obra que pasará por mil manos?
Pero la peli es buena, muy entretenida, aunque con fallos tontos. Tenemos a la nueva Jedi, Rey, que no lo es todavía, pero que se mete, casi sin querer, en una misión con un robot. Conoce a Han Solo, que es asesinado por el nuevo Dath Vader, Kylo Ren, su hijo, y nieto de Anakin. Se supone que, con esto, se desea crear un efecto similar para Rey como el que tenía el asesinato de Obi Wan Kenobi para Luke Skywalker, pero lo cierto es que la relación entre Rey y Solo es básicamente nula. Ese sentimiento tan solo se sustenta por una frase, en la que se indica que Rey ve en Solo al padre que nunca tuvo, una herramienta de mal guión, decir las cosas de forma explícita.
También de forma explícita se anuncia el entrenamiento que va a llevar a cabo Kylo Ren, para aparecer de una forma mucho más poderosa en la siguiente entrega, tal y como lo hacía Dart Vader en el episodio 5. En El Imperio Contraataca, esa "subida de nivel" en Vader, la observábamos en mil detalles, aquí, sin embargo, se dice, y ya veremos si es cierto. Por ahora, hemos visto a un malote que ha sido derrotado por una chiquilla que había cogido una espada laser por primera vez en su vida. Sí, Ren estaba herido por un tiro que le había metido Chewbacca, y ese es el motivo real de su derrota, pero Abrams no consigue explicarlo bien, y mira que es fácil, y el público se lleva la impresión de que es un manta.
En esta película, tenemos el regreso de una especie de Estrella de la Muerte, esta vez mucho más grande, capaz de destruir planetas, que también era destruida al final de la cinta, todo muy parecido al episodio 4. Pero hay un error muy tonto, que me enfadó mucho: Han Solo es asesinado por su hijo, después de que la Princesa Leia le pidiera que lo trajera de vuelta. Leia lo intuye, aunque nadie le da la confirmación oficial. Al llegar al planeta en el que está la princesa, Chewbacca pasa junto a ella, y ni siquiera se miran. Se conocen desde hace decenas de años, son la mujer y el mejor amigo de un hombre que acaba de morir, y a Abrams se le olvida, no tienen nada que decirse, ningún sentimiento en común. Leia se va a hablar con Rey, chica a la que conoce desde hace dos días, para que le cuente sus cosas...
Al final de la película, Rey encuentra a Luke, y entendemos que será entrenada en los secretos de la fuerza en el capítulo 8, tal y como hacía Luke en el 5.
Dicho esto, con ese par de fallos, que son obvios pero pasables, la película está entretenida, sin pretender innovar, se olvida de los efectos especiales injustificados, e intenta hacer lo que decíamos, recrear el espíritu de la saga, aunque yo creo que se puede crear un espíritu nuevo, y que sea igualmente bueno, o quizás mejor.
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